El primer campeonato mundial se llevó a cabo el 4 de septiembre de 1921 en Brescia.
Sin embargo, el nombre que más viene a la mente al hablar de carreras de automóviles en Italia es Monza, un autódromo construido en 1922, justo para el campeonato de ese año. Allí se han corrido todas salvo cinco ediciones del Gran Premio de Italia.
En la carrera de 1923, participó Harry A. Miller con su automóvil "American Miller 122" manejado por el conde Louis Zborowski, hecho famoso en la película Chitty Chitty Bang Bang.
El Gran Premio de Italia forma parte de la Fórmula 1 desde sus inicios y, junto con el Gran Premio de Gran Bretaña, son los únicos que han estado en el calendario todos los años. Hace cuatro décadas que ningún piloto italiano triunfa en la competencia.
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