Pedro de la Rosa tiene una espinita clavada. Quiere que su hija Olivia, la mediana, le vea competir. La mayor, Georgina, sí que disfrutó de su emoción en el podio de Hungría 2006, el día que adelantó a Schumacher entre gritos de su desconfiado ingeniero: "Vamos, Pedro, debes creer, puedes hacerlo". Ahora lucha por lograr un hueco en la parrilla y confiesa en AS sus impresiones sobre 2010.
¿Cómo lleva sus gestiones para regresar a las pistas?
Ahí estamos, no es fácil pero estoy apostando más fuerte que nunca. Mi experiencia es mi mayor aval. Y McLaren espera hasta final de año mi decisión porque quieren renovarme como probador.
¿Lucharán Alonso y Hamilton por el próximo Mundial?
Seguro, sin duda. Pienso que McLaren y Ferrari volverán a ser los equipos más fuertes en 2010, que todo regresará a la normalidad. Aunque también habrá oposición de Red Bull y Mercedes, el Mundial estará entre Fernando y Lewis. Es la gran batalla que todo el mundo está esperando. En el deporte lo que mejor funciona son los choques duales, entre dos grandes como ellos.
¿Por quién apostaría si tuviera que jugarse el dinero?
Por Hamilton.
No esperaba menos de un piloto de McLaren...
No, lo digo en serio. Fernando tiene el problema de encontrarse en su primer año en Ferrari. Tiene que adaptarse a la escudería, a su forma de trabajar, y eso puede ser un hándicap. Mientras que en McLaren todo el equipo gira en torno a Hamilton. Además, hay que tener en cuenta que el Ferrari de 2009 era un monoplaza muy difícil de pilotar, y tienen que reencontrar el camino. Nosotros terminamos mejor. Pero Alonso ganará carreras y estará ahí, no me cabe duda.
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