En los últimos años la Scuderia Ferrari había tenido una gran desventaja con respecto a algunos de sus rivales en pista (principalmente McLaren), y es que las instalaciones de Maranello no contaban con un simulador de conducción propio que permitiese entrenarse a los pilotos del Cavallino y que ayudase en el desarrollo del monoplaza.
Por este motivo Ferrari ha inaugurado oficialmente, en la sede de la Scuderia su propio simulador, tras dos años de desarrollo en cooperación con Moog, empresa especializada en el diseño de sistemas de control de defensa aeroespacial, aviones, naves espaciales, misiles, equipamiento médico o simuladores. Moog utiliza hardware especializado de AMD-ATI para el sistema.
El simulador se encuentra en un edificio de 180m2 de dos plantas, situado junto a la Gestione Sportiva, que incluye tanto el coche y la estructura de aluminio compuesto, como la sala de control. La base del sistema lo componen diez multiprocesadores con una memoria total de 60GB RAM y los datos que puede producir durante su uso se acercan a los 5GB diarios. Con un sistema de audio Dolby Surround 7.1 con una potencia de 3.500W, el realismo del simulador en cuanto a sonido es sensacional. El piloto estará sentado frente a cinco pantallas que le ofrecerán una vista de más de 180 grados.
El jefe del equipo de F1, Stefano Domenicali, ha explicado: "Es un día importante para nosotros porque la realización de este proyecto significa que ahora seremos capaces de afrontar con confianza algunos de los desafíos que conforman la Fórmula 1 moderna, mientras que pone a Ferrari a la vanguardia en términos de esta tecnología."
"Además, me complace que un proyecto tan complejo como éste, que se puso en marcha hace unos dos años, se haya completado según lo previsto gracias a los esfuerzos de todos los que trabajaron en él".
El primero en probar esta nueva tecnología ha sido Andrea Bertolini, y poco después fue el catalán Marc Gené, quién se puso a los mandos...
ViaFerrari
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